Prepara tus sentidos y adéntrate en la increíble experiencia de degustar los platos del restaurante Taberna La Era.
Tras nuestra aventura en Segway por el valle Salado de Añana, Esteban y Estela, responsables de la empresa de turismo activo SaltWay, nos recomendaron disfrutar de uno de los mejores restaurantes de la zona, el restaurante Taberna La Era. Con ganas de probar sus platos y valorar en primera persona si se trataba realmente de uno de los mejores restaurantes de Álava, nos dirigimos a Escota (Askoeta en euskera), localidad donde se ubica el restaurante Taberna La Era.
Horario de Taberna La Era
- De martes a jueves: 10:00 a 18:00.
- Viernes y sábado: 10:00 a 2:00.
- Domingo: 10:00 a 22:00.
*Lunes cerrado por descanso semanal
Un baserri (caserío) de piedra reformado, un entorno natural de gran valor, una decoración rural, una buena atención personal y unos productos de alta calidad son la carta de presentación del restaurante que nos ocupa. Dicen que el restaurante Taberna La Era es uno de los restaurantes alaveses con más carácter y con mejor relación calidad-precio de la provincia, ¿será verdad? ¿Queréis conocer nuestra experiencia a detalle? ¡Atentos!
Taberna La Era, el caserío de labranza reconvertido en restaurante.
Al terminar nuestra ruta en Segway, mientras disfrutamos de un distendido poteo por las calles de Añana, decidimos llamar al restaurante y comprobar si tenían un hueco para nosotros, ¡bingo! una mesa nos esperaba en Escota.

Decoración: Al llegar, su decoración, nos hizo esperar lo mejor. Una esmerada decoración llena de pequeños detalles nos dejó entrever que en la Taberna La Era nada era casualidad. Imágenes del valle salado, antiguas herramientas de labranza y una buena chimenea hacían que el pequeño rincón que tenían preparado para nosotros fuese acogedor, simple pero acogedor ¿para qué más?

Situación: Situado en Álava – Araba, la provincia más extensa de toda la Comunidad Autónoma del País Vasco (Euskadi) permite al restaurante Taberna La Era estar rodeado de naturaleza en estado puro. Entre grandes parcelas de labranza y junto a una pequeña concentración de casas de piedra, encontramos el que sin saberlo se convertiría en uno de nuestros restaurantes preferidos de la provincia.
Su ubicación, es perfecta para todos aquellos que recorren la autopista AP-68 a la altura de la salida Pobes-Nanclares ya que se encuentra a 7 minutos de la autopista y no nos hace perder tiempo en el desplazamiento.

Historia: El baserri (caserío) que alberga la Taberna La era tiene más de 200 años de vida, 200 años cobijando a la misma familia que le vio nacer. El que antaño fuese caserío de labranza se ha convertido en el siguiente escalón de la producción alimentaria, el restaurante.

Marta y Susana, emprendieron juntas la aventura de cocinar los mismos productos que sus bisabuelos, Moisés y Beatriz, recolectaban en sus tierras, ¡benditas tierras! Hoy en día, Susana lleva las riendas de la Taberna La Era, una tarea que ejerce de maravilla ayudada por todos los trabajadores, incluyendo a su magnífico chef Iñaki Álvarez .
Menú: El menú que elegimos fue el de fin de semana, un menú que se mostraba prometedor sobre el papel y espectacular sobre el mantel. Uno de los lemas de la Taberna La Era, nunca antes había representado tan fielmente a un restaurante, “El arte de la buena cocina se nutre de la esencia de los sabores tradicionales”.

La crema de patatas a la riojana que nos sirvieron como primer entrante supuso la apertura de los que supondría un menú con una gran relación calidad-precio, un crema con buena textura y sabor que nos traía a la memoria un plato de patatas a la riojana en cada cucharada que degustábamos.
Le siguieron la cecina de vaca con aceite de oliva, puerros rellenos de salmón con salsa de roquefort, ensalada de foie mecuit, ravioli de mozzarella y champis sobre crema de calabaza. Unos entrantes que nos sorprendieron gratamente y con los que disfrutamos.
El plato fuerte del menú fue solomillo de ternera al idiazábal. Un solomillo de gran calidad que además de estar bien cocinado, en su punto, y de presentarlo con una temperatura perfecta, se deshacía en la boca, mantequilla pura.
Atención: La atención de la camarera que nos atendió fue realmente buena. El tiempo de espera entre plato y plato fue perfecto, quizás de los mejores que hemos tenido antes, atentos siempre a la mesa para comprobar las necesidades del comensal, pero sin estresar, dejando disfrutar.

Precio: Precios muy competitivos. Poco más podemos decir de este apartado, como suelen decir…juzguen ustedes mismos.

Os recomendamos reservar lo antes posible, ¿a qué esperas?
Alicia Núñez
Un restaurante con muuuucho encanto.
El sitio es espectacular y la comida para repetir sin duda.
Un 10 para este lugar